Una Misa con fuertes sentimientos. Compartiendo pena con los que sienten pena y alegría con los que sienten alegría. Por una parte la despedida del Obispo emérito Marcelo Martorell, por el otro, la bienvenida al Obispo Nicolás Baisi.
El nuevo Obispo expresaba su santo temor y temblor, consciente del desafío que significaba ser enviado por un Papa Jesuita a esta tierra misionera fecundada por los jesuitas hace 400 años y marcada por grandes obras de sus predecesores, los Obispos Jorge Kemerer, Joaquín Piña y Marcelo Martorell.
La despedida del Obispo Monseñor Martorell fue acompañada entre otras, por sentidas palabras de sacerdotes y laicos, como también del Gobernador Dr. Herrera Ahuad y del Intendente local Claudio Filippa. El saludo de más lejos llegó desde la Iglesia de Hamburgo expresando los afectos del Arzobispo Dr. Stefan HeBe.
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